Y se repite la historia...
Por Arianna Montes
Lamentablemente, día a día nos sorprendemos con noticias de sucesos violentos que ocurren en nuestro país: asesinatos, robos, violaciones, corrupción y hasta guerras entre puntos de drogas. Uno de los sucesos más recientes en estremecer al país lo fue una pelea entre dos jovencitas de la escuela Bethzaida Velázquez en Ponce.
El país estaba indignado ante las acciones de las jovencitas. Las mismas fueron grabadas y publicadas en la red social de Facebook por la misma agresora. El vídeo empieza con una discusión entre las jóvenes, luego se ve cuándo unas de las estudiantes comienza a golpear repentinamente a la otra en la cara y le hala el pelo; mientras la víctima mucho más delgada que su agresora, le cuestiona el porqué de los golpes. Quien grabo el vídeo fue la hermana de la agresora y se escucha durante todo el vídeo cómo esta incita a que siga sucediendo la agresión. El caso, ocurrido el martes por la mañana, se comenzó a investigar rápidamente por la policía y se pautó una vista preliminar para el pasado viernes, 8 de marzo de 2013. La jueza Sheila Díaz encontró causa probable en contra de las dos jovencitas de 15 y 16 años, que actualmemte se encuentran en una institución juvenil, por agresión simple e incitación.
Es increíble pensar que un suceso tan impetuoso como este pueda ocurrir en una escuela, donde se supone que los estudiantes estén en un ambiente de aprendizaje: uno seguro y tranquilo. Aunque la ley Núm. 49 del 2008 del Departamento de Educación se estableció con el fin de prohibir los actos de hostigamiento e intimidación entre los estudiantes de escuelas públicas, al igual que el Manual de Protocolos (2011) ante este tipo de situación, esta pelea puso en entredicho si los mismos se llevan como corresponde, y si en las escuelas, las autoridades correspondientes velan por estos.
Muchos se preguntaban ante este cruel vídeo, ¿dónde estaban los guardias de seguridad en esos instantes? ¿qué hicieron los espectadores? Fue bárbaro ver cómo muchos, al acercarse, se hacían de la vista larga y no intentaban detener el problema. Aquí se refleja la falta de valores de hoy día, en la que no se tiene el coraje de señalar y actuar ante lo que no es justo o lo que simplemente está mal. Pero, no se puede hablar solo de los estudiantes o de la escuela. ¿Qué rol cumplen los padres? Se supone que durante el crecimiento y desarrollo de los niños sean estos quienes inculquen valores a sus hijos. De igual modo, les enseñen que está bien y qué no: debemos ser respetuosos con nuestro prójimo, demostrando afecto y apoyo.
Sin embargo, es un asunto delicado y complejo que no solo recae en los padres, en la escuela, en el gobierno, entre otros. Todos somos responsables porque componemos a la sociedad puertorriqueña. Si no se ven ejemplos, si cuando desde el seno del hogar se permiten burlas, y comentarios despectivos, si ante una sociedad agresiva se enseña a "dar el puño primero" o " a dar para atrás", no se puede esperar tan ingenuamente que estas jovencitas, como la agresora, puedan utilizar otros métodos para resolver los problemas, ni para expresarse civilizadamente. Lo ocurrido demuestra que hay una carencia de valores, de sentimientos, de humanidad, de disciplina... Y el quedarse a mirar, brinda la autorización de que es algo "normal", y el que suceda día a día, no significa que está correcto.
Muchos han quedado impactados e indignados ante la violencia y falta de moral que refleja lo sucedido. Pero hay que destacar que seguramente este es solo uno de muchos casos de bullying que ocurren en el país a diario. Si en las demás escuelas no hay suficiente seguridad, deben existir cientos de casos sin reportar, los cuales probablemente no se les ha prestado la atención suficiente de parte de las autoridades, padres y trabajadores sociales. Es triste pensar que tuvo que ocurrir algo de esta magnitud, tan agresivo, para que muchos se dieran cuenta del problema tan grande que ocurre día a día, y no solo de forma física.
Este caso se ha convertido en un despertar para los puertorriqueños, para que se percaten de que el bullying no es chiste, ni es una exageración o "changuería". El bullying en todas sus formas es un problema serio y todos debemos poner nuestro granito de arena para detenerlo y decir ¡alto al bullying!.
A continuación les proveemos el 'link' de la carta circular del Departamento de Educación la cual expone los puntos importantes de la ley Núm. 49.
http://intraedu.dde.pr/Cartas%20Circulares/05-2012-2013.pdf
Excelente artículo. Felicidades Arianna!!
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